
Durante esta reunión, la presidenta y el director general de la OIV realizaron una presentación de la Organización y expresaron su satisfacción por la calidad de las relaciones entabladas con las autoridades alemanas, como también por la importante participación de los expertos alemanes en los trabajos de la OIV.
El embajador manifestó también su entusiasmo por esta colaboración en un sector que no solo juega un papel económico importante (Alemania se encuentra entre los primeros diez países productores y en el cuarto lugar entre los países consumidores de vino) sino que también tiene una destacada dimensión cultural e histórica.


En esta ocasión, Monika Christmann ha realizado una presentación de la situación del sector vitícola a escala mundial y las principales tendencias de evolución.
Asimismo, ha abordado diferentes temas sobre los que la OIV se encuentra trabajando y que constituyen muchos retos para el futuro de la vitivinicultura: cuestiones medioambientales, temas relativos a la salud, al etiquetado, etc.
La presidenta de la OIV ha expresado su satisfacción por la fluida colaboración entablada con la AREV, organismo que ostenta la calidad de observador en el seno de la Organización.

La Asamblea de Regiones Europeas Vitícolas es una asociación que agrupa a las regiones vitícolas de Europa (a nivel político-profesional) y que tiene como misión defender y promover la viticultura europea. Reúne a 65 regiones de 18 países europeos.


Monika Christmann participó, ante los 123 Estados miembros del Codex Alimentarius y en el marco de las relaciones de la Comisión del Codex Alimentarius con otras organizaciones internacionales, en la mesa redonda que presidió el Dr. Awilo Ochieng Pernet, presidente de la Comisión del Codex Alimentarius, y que se centró en la colaboración entre el Codex y otras organizaciones intergubernamentales, en particular en el ámbito del desarrollo sostenible.
La presidenta de la OIV señaló que la OIV estaba participando en muchos de los proyectos en curso del Codex y que estaba especialmente implicada en los debates sobre las disposiciones relativas a los aditivos alimentarios que figuran en la Norma General del Codex para los Aditivos Alimentarios (NGAA). Además, insistió en que era necesario garantizar la uniformidad entre las normas del Codex y las de la OIV, en especial las relativas a los aditivos alimentarios utilizados para la elaboración del vino de uva.
Por otro lado, declaró que la OIV tiene muy en cuenta los trabajos del Codex y del Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios (JEFCA), ya que pretende evitar la repetición de actividades y la adopción de normas internacionales dispares.
Por lo que respecta al desarrollo sostenible, la presidenta indicó que la OIV ha desarrollado recientemente sus actividades teniendo en cuenta no solo los aspectos agronómicos, sino también los económicos y sociales.
La presidenta de la OIV concluyó con que era necesario seguir cooperando y coordinándose en lo que atañe a las actividades que revisten un interés común para la Organización y el Codex.


A pesar de que comenzó su carrera laboral en el sector automovilístico y de la seguridad en carretera, terminó en el organismo Régie des alcools, des courses et des jeux de Quebec (Canadá), del que llegó a ser presidente y director general. Le apasionó el sector del vino y tomó la iniciativa en la creación del concurso Sélections Mondiales des Vins et Spiritueux Canada, que presidió desde el año 2006.
Como degustador internacional de renombre, se embarcó desde el principio en la creación de la Federación Mundial de Grandes Concursos Internacionales de Vinos y Espirituosos (Vinofed), de la que fue secretario general y presidente.
Además de degustador internacional y presentador de los concursos más prestigiosos del mundo, fue un gran apasionado de los cruceros de largo recorrido.
Ghislain K. Laflamme fue miembro de numerosas cofradías del vino e incluso presidió una concentración mundial. Por otro lado, fue un hombre muy culto; un apasionado de la historia. Estaba orgulloso de sus raíces bretonas y disfrutaba contando con humor numerosas anécdotas de una vida dedicada al derecho y al vino.
La OIV se une al pesar de sus familiares y amigos.


Titular de la cátedra de Tecnología de los Alimentos de las universidades de Valencia, donde fue la primera ingeniera agrónoma en 1966, y de Navarra, la profesora Casp era conocida internacionalmente por sus trabajos y publicaciones sobre tecnología y seguridad alimentaria.
Miembro de la delegación española en la OIV, cabe destacar que presidió el Grupo de expertos “Formación” de 2001 a 2007 y contribuyó ampliamente a la creación de la base de datos de los cursos internacionales de formación vitivinícola. Su implicación en el mundo universitario y de la investigación tuvo continuidad como presidenta de la Asociación Universitaria Internacional del Vino (AUIV), un observador en la OIV.
Nos deja el recuerdo de una personalidad afectuosa con una gran calidad humana y unas competencias científicas reconocidas.
La OIV acompaña en el dolor a su esposo y su familia.

(c) Eva Mañez